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Hacia una Etnografía de una Economía Nacional

economia de guinea ecuatorial buena gracias al petroleo

por Hannah Appel

Cada año, el Fondo Monetario Internacional (FMI) publica una lista de las “economías mejor del mundo”. Ganadores en el 2013 incluyen Sudán del sur, economía de más rápido crecimiento del mundo y Guinea Ecuatorial: la economía con más inversiones. 1 si Guinea Ecuatorial y Sudán del sur están entre las economías “mejores” de nuestro mundo, surge la pregunta, ¿qué es una economía nacional? ¿Lo que hace medir, valor o representan? Qué significa hacer?

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Autor: Marco (Anthropology and Practice). Aprende más sobre mi y estate al tanto de mis publicaciones en Instagram.

En Guinea Ecuatorial, como en otras partes, la economía es un objeto privilegiado, tal vez el objeto privilegiado, en el discurso oficial. Agentes estatales y las instituciones multilaterales articulan futuros en sus términos: desarrollo, diversificación, crecimiento. En 1983, Naciones Unidas Relator Fernando Volio Jiménez informó de Guinea Ecuatorial que “un funcionario tras otro hasta [el Presidente] se” justifican limitaciones a la prensa (no había ninguno) y sobre la participación política (política se prohibición a las partes) “como sea necesario para el enfoque de atención en temas económicos” (1991 Fegley, 220). Más de veinte años más tarde, durante mi trabajo de campo, funcionarios del estado continuaron justificar la persistente falta de fiabilidad de electricidad o agua potable, para no hablar de los límites continuos en la prensa y en la organización política, citando la necesidad de centrarse en primer lugar en el desarrollo económico. Aquí, la economía es un objeto del futuro y una justificación para el aplazamiento constante de la actualidad. Pero, ¿qué, precisamente, es la economía, como invocado por el FMI, o por los funcionarios de estado en Guinea Ecuatorial? Tanto gesto hacia una determinada economía nacional, o como Timothy Mitchell (1998, 84) ha definido, “la estructura o totalidad de las relaciones de producción, distribución y consumo de bienes y servicios dentro de un país”. En este artículo intento sentar algunas bases para un acercamiento etnográfico a las economías nacionales como una serie mundial y, por extensión, a la escala geopolítica y categorías implícitamente confinados invocados en cualquier momento la economía se menciona.

La forma de la economía nacional ha eludido atención etnográfica concertada, a pesar de su centralidad moderna imaginarios geopolíticos y su tendencia al acecho en el fondo explicativo de mucho trabajo antropológico (Wolf 1982). En este artículo, pido a las economías nacionales se convierten en tanto inteligible, que posee unidad representacional o autoridad naturalizada y convincente, las cosas de fantasía y deseo, poder y sometimiento. 2 mi función de exploraciones en diálogo con el trabajo en la antropología del capitalismo y los estudios sociales de las finanzas, donde con frecuencia han tenido cuestiones de mercados, agentes de mercado y las instituciones, dinero y la experiencia de la economía Centro de la escena. 3 a menudo, sin embargo, la economía como algo en sí mismo puede seguir siendo una caja conceptual underspecified, o bien una especie de contexto causal. La economía no es, sin embargo, un repositorio vacío o sin bordes sólo poblado por los mercados, instituciones financieras y actores, mano de obra, materias primas y dinero. Más bien, es un sociohistórico específico y sorprendentemente reciente y la formación geopolítica (Mitchell 2002). Dirigiendo nuestra atención etnográfica que, sostengo, hará una contribución no sólo a la antropología del capitalismo, sino también, significativamente, a la antropología del estado. Así, en este artículo, me uno a un puñado de autores (Mitchell 1998, 2011, 2014; 2014 de Holmes; Elyachar 2012; Roitman de 2005; Gibson-Graham 1996; 2015 de Ralph) que, de diferentes maneras, han prestado atención explícita a la forma de la economía nacional.

El caso de nuevos ricos en petróleo ecuatoguineano ofrece un único momento histórico en el que la fabricación y el mantenimiento de algo llaman una economía nacional era considerado extensamente (y con cierto grado de amnesia) un nuevo proceso. Tomando una serie de conferencias económicas nacionales en Guinea Ecuatorial como un punto de partida, rastrear cómo y en la economía nacional qué efectos Guinea Ecuatorial fue imaginado y reproducen a través de la teoría económica y deseo, futuridad y distopía, estado y poder corporativo. En particular, el material etnográfico muestra cómo en forma de una teoría económica conocida como la maldición de los recursos y la economía nacional de Guinea Ecuatorial con formato en la estela del petróleo. Yuxtaponiendo la beca sobre performatividad económica con la historia política de Guinea Ecuatorial y el poder del aceite de los Estados Unidos de las empresas en las iluminaciones del sur globales el abierto y la imprevisibilidad de lo que Michel Callon ha llamado economía “en la naturaleza” (véase Callon y Rabeharisoa 2003). 4 teoría de la maldición de recursos en Guinea Ecuatorial no sólo ayudó a crear el mundo postula, pero también ayudó a crear una distancia políticamente consecuente entre algo que se llama la economía nacional, por un lado y las experiencias locales de la violencia de estado y poder corporativo, en el otro. Así, en lugar de un proceso que abarca de crear lo que sólo pretendida describir, teoría económica en el campo creado fracturada espacios epistemológicos y políticos — espacios productivos donde el mundo y sus representaciones (aquí, el nacional economía) fueron tirados aparte, sentado mal al lado de uno a otro para que todos puedan ver. Me refiero a estos como espacios de como-si: distorsión, simplificación, olvido, nostalgia. Es, en parte, a través de estos productivos como pasaría si objetos epistemológicos como las economías nacionales vienen a ejercer gran parte de su poder, mientras que el contingente restante y contestable.

Yo empezar con un marco conceptual de dos partes, en un esfuerzo por pensar en las economías nacionales se convirtió en no sólo inteligible y convincente pero también tienden a deslizarse de la vista de la antropología. En primer lugar, que se extiende Timothy Mitchell (1998, 2002, 2011, 2014) trabajo, chronicle el momento de mediados del siglo XX cuando la economía, limitada por las fronteras nacionales, comenzó a substituir la espacialidad de Imperio. En diálogo con la etnografía a seguir, en el que la política de números y medición emerge como central en la historia, tomo nota de cómo las nuevas técnicas de medición disponible en este momento de mediados del siglo XX (bruto producto interno o PBI, por ejemplo) representa el orden postcolonial radicalmente desigual lícitos y aparentemente, sujetos a la gestión científica. Este interludio histórico termina en el momento cuando los antropólogos “abandonaron el estudio de las economías modernas a los economistas” (Hann y 2011 Hart, 14), y usar ese momento como la bisagra de una demostración breve sección teórica cómo los estudios sociales de Finanzas ofrece un conjunto de herramientas analíticas diseñadas para interrogar a las llamadas economías modernas que muchos antropólogos habían abjuraron.

En las secciones etnográficas que seguirán, rastrear cómo la performatividad de la teoría económica — maldecir a la teoría de los recursos, en particular — desplegado erráticamente en terreno profundamente politizado, produciendo los espacios fracturados del como-si son tanto sobre el estado y como el buen funcionamiento de pericia económica de energía. Yo también chronicle el poder seductor de algo llamado el sector privado, a menudo metonímicamente tomado para la economíay especialmente seductor en un lugar como Guinea Ecuatorial donde el Estado represivo se siente omnipresente. En conclusión, abro las implicaciones teóricas y metodológicas de atención etnográfica a la forma de la economía nacional: para que no seamos tentados a imaginar a Guinea Ecuatorial como excepcional (que, por supuesto, es de alguna manera) o generalizar a otros Las economías africanas o las economías de los países del sur, necesitamos sólo pensamos Brexit en relación con la Unión Europea o el curso de la colisión entre el Antropoceno y el crecimiento económico (más a menudo posible calculado a nivel nacional) comenzar a imaginar el etnográfico posibilidades de las economías nacionales en general, como tal vez el más privilegiado objeto epistemológico y político de nuestra modernidad desigualmente compartida.

LA ECONOMÍA NACIONAL, HISTORIA Y TEORÍA

Era de Maynard (1936) La Teoría General del empleo, el interés y el dinero que en primer lugar postula la economía como una limitada todo, definidos por las fronteras del Estado-nación y los Estados de herramientas tenía a su disposición ( la agregación estadística, gasto público) para gestionar esta esfera aparentemente distinta (Coyle 2014; Mitchell 1998, 2011; Stiglitz, Sen y Fitoussi 2010). De Keynes (1940) libro posterior, Cómo pagar la guerra, inspirado en el Estado británico a los economistas de la Comisión para el desarrollo de la primera aproximación de lo que ahora llamamos PIB (2014 Coyle). A diferencia de las anteriores prácticas de la contabilidad del ingreso nacional, indicadores de PIB, tipo el FMI utiliza para sus “Mejores economías” lista — incluyen las compras de gobierno y por lo tanto gasto en su cuenta, poniendo los gobiernos nacionales en el Centro Nacional de economías en al menos dos formas. Los gobiernos nacionales están contados y contador en las estadísticas del PIB: “por el contrario al liberalismo puramente teórico, liberalismo ‘real’ implica para el estado un papel como órgano de inteligencia económica, recopilación y difusión de información necesaria para los agentes económicos para actuar en el mercado”(Desrosières 2003, 557). Gracias a historias desigualmente globalizadas de liberal y neoliberal económico pensado, el sector privado se toma a menudo metonímicamente para la economía, pese a que todo el mundo, estado de presupuestos y gastos del sector público son responsables de una gran porcentaje del PIB total (Collier 2005; Mbembe y Roitman 1995; Elyachar 2012). La economía nacional, por lo tanto, en primera instancia un proyecto epistemológico del estado, nace en un momento geopolítico en el que potencias occidentales estaban buscando herramientas para gestionar la gran depresión, pagar para la guerra y responder a la decadencia imperial. Fue en ese momento que los Estados cada vez más asumieron la responsabilidad explícita de las actividades económicas nominalmente dentro de sus fronteras y buscaron instrumentos estadísticos como el ingreso per cápita, renta nacional contabilidad y PIB para conocer y gestionar su nuevo carga (Stiglitz, Sen y Fitoussi 2010; Vanoli 2005). Como Chris Hann y Keith Hart (2011, 34) puesto le, “Estados reivindicó el derecho a administrar el dinero, los mercados y la acumulación de interés nacional; y por esta razón hoy ‘la economía’ se refiere principalmente al país que vivimos”(véase también Mitchell 2002; Stiglitz, Sen y Fitoussi 2010; Vanoli 2005). Esta, entonces, es la sorprendente historia del nacionalismo banal (Billig 1995) de la el; por qué la economía, sin especificación de escalar (regional, municipal, global), reflexivamente se refiere a las economías nacionales (véase también Mitchell 2002).

Esta historia de los problemas presente ampliamente aceptado teleologías de la globalización, en que un mundo de Estados-nación independientes recientemente ha dado paso a órdenes transnacionales intensificadas. Por el contrario, la historia reciente nos muestra que la realización del nacional siempre ya era sensible a cambio de orden mundial: el fin del Imperio, proyectos de desarrollo, nuevas instituciones multilaterales y la hegemonía de Estados Unidos. Imperios se derrumbaron a raíz de la segunda guerra mundial y acompañada de movimientos anticolonial emergente hegemonía estadounidense reformular el mundo como una colección de los Estados-nación (institucionalizada en las Naciones Unidas, el Banco Mundial y el FMI), las prácticas de medición, comparación y evaluación desarrollaron a buen ritmo. Entre 1945 y 1955 el número de países publican las estimaciones de la renta nacional pasó de treinta y nueve a noventa y tres, y en 1953 las Naciones Unidas publicó el sistema primero de cuentas nacionales (SNA), un método de contabilidad nacional para el uso de todos los miembros Estados (Speich 2011; 2014 de Coyle). Una vez más, el año no es casualidad. Estados Unidos había prescindido el equivalente a $ 120 billones (en dólares 2016) a través del Marshall Plan, y las Naciones Unidas tuvo la tarea de seguimiento de estos recursos: “los países que reciben ayuda de posguerra bajo el plan de Marshall de los Estados Unidos debían producir una estimación del PIB…. Ser que una nación fue, en parte, para conocer su PIB”(economista 2016; énfasis del autor). Como que se relatan a continuación, podemos ver esta interacción entre la transnacional y el nacional en Guinea Ecuatorial: cuando aceite rentas de las empresas multinacionales norteamericanas comenzaron a circular a finales de 1990, el país fue punto recientemente en la transnacional vigilancia regímenes de organizaciones internacionales, los burócratas, los gobiernos y las corporaciones. Esta vigilancia exigió algo nuevamente legible como una economía nacional que no había sido exigida en la misma forma antes de aceite.

Como antiguas colonias se convirtieron en Estados soberanos, desarrollo reemplazado colonialismo el marco oficial de las relaciones entre el norte y el sur (Cooper 2015; global Escobar 1995). Las herramientas estadísticas recientemente disponibles en este momento, como SNA, ingreso per cápita y PIB — se usaron para comparar recientemente como Estados soberanos — pronto Senegal era “apenas como” Francia y podría compararse como tal. En lugar de demostrar los efectos desastrosos que relacional del colonialismo, estas herramientas se emplearon para demostrar la pobreza mundial en Estados-nación aparentemente discreto y a intervenir, ahora en nombre del crecimiento económico. Desarrollo, en otras palabras, llevó a la economía nacional recién medible como su objeto (Escobar 1995; Mitchell 2002; Speich 2011). El SNA se convirtió en centro de competencia de la guerra fría y la comparación, como países comunistas desarrollaron el sistema de producto Material (MPS) y el producto Material neto (NMP) como las contramedidas al PIB (2014 Coyle). Lejos de ser meras herramientas, indicadores económicos agregados se convirtió en una lengua autorizada de lucha ideológica, el nacionalismo y el imperialismo. Las economías nacionales aquí son ambos nuevamente legible y reciente. Antiguas potencias coloniales y a los Estados Unidos como un poder imperial emergente, elide historia colonial racista, representación lícitas las desigualdades profundas creadas por ese sistema. En otras palabras, “la vista de la renta nacional de la desigualdad global no fuerza los políticos occidentales, a reconsiderar la lógica colonial de dominación fundamentalmente. Las nociones de supremacía, que utiliza para basarse en consideraciones culturales, encontraron fácil expresión en el lenguaje estadísticamente en base de la fuerza económica”(Speich 2011, 21). Estos nuevos indicadores demostraron simbólicamente apremiante para las Naciones recién soberanas El PIB fue una marca de orgullo de la soberanía y un reclamo de soberana interdependencia (Cattelino 2008). Los términos y condiciones de las finanzas internacionales, ¿qué tamaño de préstamo? a ¿qué tasa de interés? ¿Qué plazo de pago?:, desde este momento, han sido parcialmente contingente sobre los indicadores de PIB. El SNA o el PIB, entonces, son convincentes Marcos simbólicos que generan hechos performativos y secuelas afectivas — las tasas de interés, deseo, soberanía, comparabilidad, competencia, supremacía lícita, nacionalismo. En su transposability, su modularidad y su intensidad afectiva, son análogos a y constitutiva de la de Benedict Anderson (1993) idea de la nación modular. “En todas las instancias de la contabilidad del ingreso nacional, el estado-nación fue cosificado como categoría del conocimiento y por lo tanto enormemente estabilizado como una entidad histórica” (Speich 2011, 22; véase también Meyer et al., 1997).

Este momento de mediados del siglo XX, cuando la economía, limitada por las fronteras nacionales, comenzó a substituir la espacialidad del Imperio precipita el debate formalista substantivist en Antropología, que comenzó con La gran transformación ( Polanyi 2001) y pico en la década de 1970. Los economistas que trabajan en África colonial todavía dio vuelta a antropólogos con preguntas sobre nonmarket bienes y servicios, producción doméstica y denominaciones no monetarias. Fue en parte esta inscripción de antropólogos en los primeros intentos de cuantificar las economías africanas que estimuló el desacuerdo sobre la aplicabilidad universal de las herramientas de la economía. Los sustantivistas —Karl Polanyi, Arensberg de Conrad y Harry Pearson (1957), Paul Bohannan y George Dalton (1962; vea también Dalton 1969), y Marshall Sahlins (1972, 1976) entre otros, se negó la universalidad del cálculo económico e insistió en que “la económica” o “los maoríes” no reconocería algo llamado una economía aparte de la vida sociocultural. Por consiguiente, Polanyi y sus seguidores “abandonaron el estudio de las economías modernas a los economistas” (Hann y 2011 Hart, 14). Y sin embargo, rechazo de sustantivistas de las técnicas de calculador de la economía podría no haber anticipado que el poder, ubicuidad, material y efectos simbólicos en el mundo de las formas de representación, ahora estable lo suficiente como para mentir en el centro de global política imaginarios. Parece ser a través de esta historia, en parte, que las economías nacionales se deslizaron en el fondo del trabajo etnográfico. Es también a través de esta historia, sin embargo, que podemos recuperar la centralidad de la fabricación de escala nacional, el estado y las historias post/colonial de indicadores como PIB a la vida analítica de la forma de la economía nacional.

Si el debate formalista substantivist había dirigido Antropología de las economías modernas llamadas por un tiempo, la última década o más ha visto un cambio importante en la antropología, enfoques feministas al capitalismo y los estudios sociales de las finanzas en particular. Los eruditos ahora ponen los economistas, las corporaciones, instituciones financieras, mercados y banca central aún bajo escrutinio etnográfico. Tamizar a través de esta bibliografía para una atención sostenida a la forma de la economía nacional, sin embargo, es más complicado. Considerar de Callon (1998, 2) innovador las leyes de los mercados, que se abre al afirmar que “economía, en el sentido amplio del término, realiza, formas y formatos de la economía, en lugar de observar cómo funciona.” Esta declaración inicial de la tesis de performatividad económica — como la propuesta de que la economía realiza la economía llegó a ser conocido, ha sido tremendamente generativo para los estudios sociales de financiamiento (MacKenzie 2008; 2013 de Miyazaki; 2014 de Holmes), y en efecto tomarlo etnográficamente más abajo. Pero en el contexto de la atención a escala, el estado y la geopolítica, quiero destacar un deslizamiento común entre la economía (invocado sin especificidad escalar) y el mercado, o los dispositivos del mercado. Por ejemplo, de Callon (1998, 3) libro pretende analizar la relación entre la economía y la economía, para lo cual, dice, “el punto de partida más conveniente es la definición general del mercado”. De hecho, la tesis de la performatividad ha prestado mucha atención a los mercados, agentes de mercado, mercado materialidad y la performatividad de la economía en esto. Pero la relación de todo esto algo que se llama la economía, menos aún de una determinada economía nacional, aún no está claro. Más recientemente, Koray Çalişkan y Callon (2009, 2010) han instado a la provincialización de la economía y cambiar nuestro enfoque a los procesos de Economización (véase también oso et al 2015). Por un lado, por supuesto estoy de acuerdo; la economía es procesual — continuamente hecha y rehecha en la práctica diaria. Por otro lado, como he argumentado más arriba, el el— que más prosaicos y de rutina de definido artículos que Çalişkan y Callon nos instan a descartar — retóricamente hace un objeto geopolítico cuyo límite tácito es de la nación (de la economía Mitchell 2002). Así, a de Callon (1998; véase también Çalişkan y Callon 2009) dictamen que hay no hay economía sin economía, este artículo responde sí y hay no hay economía sin estado.

Antropólogos en diálogo con los estudios sociales de finanzas ofrecen material más sustancialmente vinculado al terreno geopolítico de una determinada economía. De Douglas Holmes (2014) Economía de palabras, un relato en vivo de pensamiento macroeconómico como la política monetaria en los bancos centrales de Nueva Zelanda, Europa y los Estados Unidos — tal vez ha ido más lejos en esta dirección. Mucha atención a las publicaciones y declaraciones de los banqueros centrales lleva Holmes (2014, 14) para argumentar que las narrativas de los bancos centrales son”generadora de un campo comunicativo dentro del cual y por que la economía está hecha, rehecha y deshecha”. Después de Holmes (2014, 23), también pretendo entender «la economía como un hecho empírico», pero me llama la atención cómo su cuenta de la economía— de intimidad etnográfico con expertos, prácticas de expertos y documentos de expertos, difiere profundamente de la vida pública más de la economía nacional de Guinea Ecuatorial que presento a continuación. En lugar de una economía que los banqueros centrales tratan de aprehender y manejar en tiempo real y prospectiva, encontré una economía a la que se decían a subordinar sus necesidades; que las personas tenían esperanza podrían encontrar y participar lavada sórdidas relaciones transnacionales petroleras y el estado de Guinea Ecuatorial en tópicos de la teoría económica. Donde, por interlocutores de Holmes, la economía (que no especifica una escala) es un comunicativo campo de experimentación y de intervención, la economía nacional, presento a continuación es un campo comunicado de contestación política y la secuelas del colonialismo. Ambos enfoques (y más!) son necesarios.

El material etnográfico más abajo es quizás en el más cercano diálogo con de Bill Maurer (2005, 2007) trabajo en finanzas offshore en el Caribe y África del sur, de James Ferguson (1994) en la diagnosis equivocada radical del Banco Mundial de Economía nacional de Lesotho, o el trabajo de Walter Rodney (1982) y Fred Cooper (2015, 36), quien nos recuerda que “para ver un Africa, Asia o Europa que ‘resultados económicos’ pueden compararse con otros oscurece tanto el mecanismos históricos a través de que dichas entidades se imaginaba constituidos y la naturaleza de las conexiones internacionales de hoy.” Estas falsas equivalencias y disavowals de conexión histórica son precisamente los efectos de herramientas macroeconómicas como el PIB y tasa de crecimiento nacional cuando atraviese desigualdad postcolonial. Por un lado, estas herramientas ofrecen un lenguaje de experto de comparabilidad y la igualdad de potenciales. Por otra parte, se legitiman y dehistoricize radical desigualdad, representación de jerarquías de la supremacía global lícitos en lenguaje científico (Speich 2011). Economía nacional de Guinea Ecuatorial es rehecho con la llegada de importantes empresas de petróleo y gas de Estados Unidos, estas historias de dominación son el terreno sobre el que se construyen las falacias de la igualdad liberal.

La etnografía que ahora paso llama la atención sobre la relación entre la teoría económica, en este caso, el recurso de maldición, y algo llamado la economía nacional en terreno postcolonial. Mientras que la performatividad de la teoría económica estaba sólidamente presente en Guinea Ecuatorial, el campo también estaba lleno de fracasos performativos y la productividad multivalente de fallos para hacer de mundo económico (mayordomo 2010). Fallas productivas llevaba la economía nacional en su modo poético, en el cual “el presupuesto debe actuar como si se tratara de una representación realista” (Larkin 2013, 335; vea también Mbembe 2001; Mbembe y Roitman, 1995). Quiero llamar la atención a estos espacios de simultaneidad entre la solidez y el estado incompleto, entre representaciones performativas y el mundo que ambos (no) describir y (no) crear. Estos son los espacios del como-si: distorsión, simplificación, olvidar. Espacios políticos amplios y polémicos, como la ifs tanto perturban el funcionamiento liso de conocimientos y hacen espacio para las economías nacionales a ejercer gran parte de su poder.

¿UNA NUEVA ECONOMÍA NACIONAL?

En 1997, Guinea Ecuatorial celebró su primera Conferencia económica nacional. Había habido conferencias nivel nacional antes, pero la Conferencia de 1997 fue distinguida por el hecho de que fue concebido, documentado y difundido por los organizadores de su estado como la Conferencia económica nacional “primero” de Guinea Ecuatorial (República de Guinea Ecuatorial 1997). Una empresa estadounidense había descubierto petróleo tres años antes, y pequeñas cantidades de dinero de los contratos de exploración habían empezado a circular en el país. Esto fue un giro dramático de los acontecimientos de un microestado caracterizada por colapso económico sin precedentes en la década de 1970 y una agobiante carga de la deuda de la década de 1990. En diciembre de 2007, dos meses en mi trabajo de campo y diez años después de la primera Conferencia económica nacional, al ras con la riqueza del petróleo, Guinea Ecuatorial celebró su segunda Conferencia económica nacional. Aquí otra vez, a pesar de conferencias sobre otros temas en la década provisional, la designación de “segunda” era una parte oficial del título de la Conferencia: “Conferencia económica nacional II. Plan Nacional de desarrollo económico. Agenda para la diversificación de las fuentes de crecimiento. Guinea Ecuatorial hacia el horizonte 2020.” ¿Cómo entender la idea, implícita en los descriptores de la “primeras” y “segunda”, que la economía nacional, o por lo menos una conferencia sobre él, era algo nuevo en la estela de aceite? Aparentemente ahistórico o amnésico, estos primeros vienen en relieve más volviendo brevemente en la historia poscolonial inmediata y colonial de Guinea Ecuatorial.

Mientras que España adquirió los derechos imperiales a lo que se llamó la Guinea Española en 1777, no fue hasta la década de 1930 que misioneros españoles habían siquiera visto el interior continental Río Muni y mucho menos establece reglas administrativas de cualquier tipo (Bidyogo 1977; Fegley 1991; Sundiata 1990). Mientras que la isla de Bioko es una explotación económica y políticamente estratégica, con el aumento de la presencia española si no regla, Río Muni “fue visto como un imán para la población de la frontera (de Gabón y Camerún) porque era un lugar donde censos, impuestos nativos, gravámenes y la nativa justicia [fueron] desconocido. Según un funcionario francés, era posible para los africanos a vivir ‘ total libertad’ en Río Muni”(Sundiata 1990, 34). Aunque era colonial de Guinea Ecuatorial no puede ser caracterizado de forma homogénea, procesos de regla administrativa extranjera que fueron (irregularmente) característicos de otros lugares, incluyendo representación estadística, no captura Guinea Ecuatorial en el mismo manera.

Esta excepcional relación estadística continuó después de la independencia en 1968. En los años posteriores, en medio de intentos de golpe de Estado español, las tensiones políticas crecientes, y lo ecuatoguineanos me describieron como cierto líder Macías Nguema deterioro de la salud mental, Guinea Ecuatorial descendió en violencia profunda. En la década entre 1968 y 1978 aproximadamente un tercio de la población fue matado o huyeron al exilio. Durante este tiempo, identificación como intelectual fue motivo para ser condenado a muerte, y las estadísticas eran ilegales. “Después de 1970 allí no era confiable una figura económica, gobierno estadística o censo informe se encuentran en el país” (Fegley 1991, 72). El hombre que finalmente tomó el poder en un golpe de estado de 1979, Obiang Nguema Mbasogo, Presidente todavía en el año 2017, se desempeñó como jefe de la seguridad en el régimen anterior y estuvo implicado íntimamente en sus brutalidades. Golpe de estado de Obiang vuelto observadores extranjeros en el país por primera vez, y un abogado uruguayo invitado a Guinea Ecuatorial para presenciar el cambio de régimen escribió una cuenta de la situación económica que encontró en 1979:

La economía fue paralizada a todos los efectos. Los servicios básicos — energía eléctrica, transporte, correos, bancos, comunicaciones, fueron prácticamente parada…. Macías, como jefe de estado, tuvo el tesoro nacional a su Palacio de Nzeng Ayong… administra los fondos del estado en su casa…. Comercio está prácticamente detenida en Malabo. Hay sólo unas pocas tiendas pequeñas… todavía abierto, pero sus estantes están vacíos. No es un restaurante único en toda la ciudad. No ha habido energía eléctrica desde 1978. Durante cuatro años o menos, allí ha sido no prensa escrita en el país porque, según el gobierno, no ha habido ningún papel. (Artucio 1979, 14-15)

Como Randall Fegley (1991, 155) resume, “en ninguna parte en cualquier momento había una economía se derrumbó en el sentido de que Guinea Ecuatorial había en 1978.”

Aunque ayuda extranjera en Guinea Ecuatorial con el advenimiento del régimen de Obiang y el país se unió a la comunidad económica de Estados africanos centrales (CEMAC) en 1988, los renovados vínculos tenían poco efecto en una relación ya tensa con ciertas formas de producción de conocimiento. Durante mi tiempo en Guinea Ecuatorial, el Ministerio de Hacienda y presupuestos era rutinariamente sin electricidad por días en extremo. Permaneció constantemente entornada la puerta de la calle frente a los archivos del Ministerio, y precariamente apilados archivos y papeles escaparon a la calle, atrapado por vientos harmattan o empapado en barro de la temporada de lluvias. Cuando hablé con un abogado Guineoecuatoriano sobre acceso a los archivos, él quipped, “Aquí, es más fácil encontrar petróleo que la información”. Por su parte, el Fondo Monetario Internacional (2009, 16) escribió que “los datos sobre las cuentas nacionales, balanza de pagos y la inflación tienen limitaciones significativas y dificultan obtener una representación precisa de la actuación de la sector no petrolero.” Note el énfasis en el sector no petrolero . Aunque el informe no especifica por qué, uno puede deducir que contabilidad de la industria petrolera constituye el espacio de datos y administración pública de Guinea Ecuatorial está contractualmente obligada a mantener cierto tipo de registros en el sector de petróleo y gas que no son obligatorios fuera de esos límites.

De errática administración colonial al tesoro nacional en Macías Nzeng Ayong a registros del Ministerio en la calle, Guinea Ecuatorial ha tenido una relación larga, llena con los tipos de enumeración y prácticas constitutivas de la grabación la forma de la economía nacional. Y sin embargo, como dinero del petróleo comenzaron a circular a mediados de la década de 1990, esa forma fue interpelada en nuevas formas. Una economía nacional aceptablemente documentada se convirtió recientemente exigido y recién posible, aclamado por la visibilidad de una sola — y singularmente rentable — materias primas globales. La economía, en otras palabras, no son anteriores aceite de manera simple, como una esfera independiente lista para ser poblada. Por el contrario, la circulación transnacional de aceite hace economía nacional de Guinea Ecuatorial posible y necesario de nuevas maneras. Nacional, en otras palabras, siempre ya se enreda con las transnacionales, los movimientos de bultos de capital global, cumplimiento de normas internacionales de contabilidad pública, y lo que Callon ha descrito como la teoría económica “en la naturaleza.”

Hidrocarburos representan más del 99% de Guinea Ecuatorial de PIB. Esta dependencia de un único producto, no renovable, sujeto a fluctuaciones de precio radical, dominadas por extranjeros conocimientos y capital, pero también muy rentable para el estado local — hace Guinea Ecuatorial parecen ser un caso de estudio para la maldición de recursos llamado , una teoría de economía y ciencia política que analiza el estado del aceite típico y sus patologías. Teoría de la maldición de recursos sugiere que Guinea Ecuatorial ahora se convertirá en un miembro de una clase de Estados que incluye a Nigeria, Venezuela y Kazajistán, entre otros, en el que la afluencia de dinero del petróleo alimenta un conjunto distintivo de problemas económicos y políticos incluyendo las tendencias antidemocráticas, la corrupción y la mala distribución de las rentas del petróleo (Ebrahim-Zadeh 2003; Hirschman, 1958; Humphreys, Sachs y Stiglitz 2007; McSherry 2006; Sachs y Warner 1995; para críticas, vea Weszkalnys 2011; Mitchell 2011). Tanto la idea de la maldición de los recursos y un subconjunto de esta teoría, conocida como la enfermedad holandesa, distribuido ampliamente en Guinea Ecuatorial. Enfermedad holandesa toma su nombre de los países bajos, donde, después de descubrimientos petróleo y gas en el mar del norte en la década de 1970, ingresos del sector manufacturero se desplomaron. Esta enfermedad llamada ahora se refiere a la dependencia excesiva de los países ricos en recursos en petróleo, en detrimento de otros sectores productivos. Los economistas prescriben diversificación del petróleo — agricultura! ¡Turismo! ÉL! — como el tratamiento para este mal.

Nota cómo la teoría de la maldición de recursos mueve la economía nacional en tiempo y espacio, estructura como algo en el futuro para diversificar, separa las historias locales y la participación de las empresas transnacionales, causal atar su destino en cambio a las propiedades de translocal de hidrocarburos. Mientras que discuten la vida etnográfica de teoría económica y la maldición de los recursos en particular largamente por debajo, aquí quiero su poder a desentrañar el mundo de su representación de la bandera (véase también Mitchell 2002). En el programa de desempeño muestra el mundo y su representación a ser co-constitutive, hay momentos cuando la distancia entre ellos se convierte en el espacio de la política y el poder; el mundo sentado incómodamente junto con su representación: el espacio del como-si.

UTOPÍA y distopía I: La maldición de los recursos y la sal en el oro

En la Conferencia de 2007, el Presidente y ministros de gobierno, representantes de la empresa de aceite, empresarios nacionales e internacionales, con la esperanza de invertir, el Banco Mundial, el FMI, la USAID, los delegados de la Unión Europea, los cabilderos de Washington, D.C. y regional diplomáticos fueron todos reunidos en el nombre del futuro: horizonte 2020. Después de un día inicial de la apertura de las ceremonias y reuniones a puerta cerrada, día 2 ante participantes de la Conferencia cuatro sesiones concurrentes, un día, infraestructura, sector social, sector público y sector privado. He seguido la decididamente mayor parte de la multitud en la reunión de sector privado.

Al entrar en la sala, asistentes entregaron a cada asistente un estuche plástico, modelado después de un maletín, que contiene más información agregada sobre Guinea Ecuatorial que nunca podría decirse que había sido liberado al público. Teniendo en cuenta las historias de información narrada anteriormente, material impreso de la conferencia fue sorprendente. Cada maletín plástico incluye tres folletos de setenta y cinco páginas cada uno. Imprimir en color vibrante con gráficos extensos, el primer librito ofrece un diagnóstico económico y social del país; las segunda, estrategias para mejorar que el diagnóstico en los próximos trece años; y el tercero, un perfil de la pobreza. El paquete también incluyó cinco folletos pequeños de análisis demográfico y estadístico. Mientras esperábamos para que los procedimientos iniciar, público admirado audiblemente el material. ¿De dónde provino? ¿Quién lo escribió? ¿Que produce las estadísticas? ¿Hay alguna razón para pensar que nada de eso es exacto? La (re) producción y circulación de formas muy reprimió de información juntada con la teoría económica-haciendo convierten estos folletos en que un informante acertadamente llamado “sueño de papeles”. En la Conferencia y después, muchos compartieron el sentimiento que los materiales eran más ensueños girar encima de teoría económica que confiable representaciones de una realidad económica externa. Este es el espacio entre el mundo y su representación como dato etnográfico. ¿Lo que es posible en estos espacios? ¿Qué pasa aquí?

Los papeles de sueño cobran vida a través de largas horas en la sesión privada, como el Ministro de minas, seguido por representantes de la estatal de petróleo y compañías de gas y luego una agro-hombre de negocios alemán aparentemente en el proceso de intermediación un grande lidiar con la Gobierno, uno tras otro narrado un futuro utópico y surrealista a la vez. Transcribimos (en traducción) extractos de cada una de estas narraciones, intencionalmente encadenar juntos para evocar el surrealismo de su progresión.

En el sector energético, el gobierno construirá dos plantas de acondicionamiento para disposición de gas para uso local y disminuir la dependencia continua en el procesamiento de extranjeros. También se construirá una refinería modular en el país para bajar los precios. En 2020, de modernas instalaciones en Guinea Ecuatorial monetizará el gas que actualmente se quema en el proceso de producción de petróleo no sólo aquí, sino también en Camerún y Nigeria.

El potencial de la industria pesquera es colosal, con una capacidad estimada de local de 65 mil toneladas por año, el equivalente de 100 millones de dólares. El gobierno construirá dos centros industriales y fábricas al servicio de la industria del hielo. Educará a oceanógrafos e ingenieros de barco. En 2020 habrá una flota de naves de pesca industrial y una industria que produce productos de valor agregado para la exportación, incluyendo pescado salado, secado y ahumado, en conserva y envasados los productos y modernas granjas. Annobón será el centro de la industria, donde las mujeres se convertirá en pescadores comerciales.

Guinea Ecuatorial tiene el suelo más rico del mundo por cultivants tropical. 2020 agricultura local suministrará cien por ciento de las necesidades nutricionales y habrá más para la exportación. Se conservan los bosques de 2020. Turismo, es también un sector importante que genera empleo y erradica la pobreza. Guinea Ecuatorial será un destino de lujo y Turismo de negocios, que ofrece safaris de especies endémicas, suntuosos alojamientos en islas remotas e innumerables oportunidades para invertir mientras que recrear.

Pequeñas empresas y el sector empresarial son la prioridad en este proceso. El sector privado debe conducir la economía. Esto requerirá de microfinanzas, préstamos a pequeñas empresas, infraestructura de exportación, acceso transparente a crédito para las pequeñas empresas. Pero el oro puro, el hombre alemán sugerido la sesión concluyó, es en sal. La producción de sal, junto con la soda cáustica y cloro, es el primer paso en la industrialización moderna y luego en la industria química real: plástico y otros productos derivados del petróleo que hacen sal de oro puro.

Como él se apresuró a pasar sus últimas frases improbables, que ha dicho repetidamente y fuerte para poner fin a su presentación, el Ministro de minas estaba finalmente a la conclusión de la sesión. 2020, Guinea Ecuatorial será un exitoso modelo de África de la transición de una economía del petróleo a una economía diversificada. Guinea Ecuatorial será el primer país del hemisferio sur han evitado la maldición de los recursos.

El futuro de la sal en oro fue narrado por cada presentador y detallado en el material impreso como una ruta a través de las predicciones de la teoría económica. Que los presentadores de la Conferencia y el material impreso habían presentado la enfermedad holandesa, en particular, como una amenaza latente era incongruente de múltiples maneras. En primer lugar, el país había sido sin un sector agrícolo productivo largo antes del descubrimiento del petróleo, dejó solo a otras industrias para consumo interno o exportación. Lejos de ser una enfermedad que contrajo en relación al petróleo, la subida y la caída de una industria de cacao una vez rentable tenían todo para hacer con coloniales y poscoloniales de las relaciones entre España y Guinea Ecuatorial, Nigeria y Liberia mano de obra, tierra de Fernandino propietarios, contemporáneo de5 luchas sobre las importaciones procedentes de Camerún y asuntos internos de la propiedad privada. Por otra parte, Gabón una vez rico en petróleo al otro lado de la frontera oriental del país y las plataformas costa afuera de Nigeria visible en noches claras desde las orillas de Malabo, ecuatoguineanos no necesitaba una teoría económica para entender los complejos riesgos de convertirse en un exportador de petróleo, que claramente tenía todo que ver con el cóctel tóxico de transnacionales petroleras y la política local. Y sin embargo, muchos en la Conferencia de una narrativa que podría poner estos resultados al pie de un recurso y no a los pies del poder local o transnacional. La maldición de recursos proporciona un seguro, causal, y autoridad narrativa que sustituyó a las historias locales de poder y la propiedad, ofreciendo una explicación modular para los males sociales y económicos que trasladó la responsabilidad en tiempo y espacio: de local con conexión a tierra historias y hacia el futuro, ya visto en otros lados, supuestamente inherentes a las cualidades del recurso. La Conferencia se convirtió en evitar una potencialidad que hay frente a la reorganización de las distribuciones de energía aquí. Teoría económica — la maldición de los recursos, apertura a distancia políticamente consecuente entre algo llamado la economía nacional, por un lado, y experiencias locales de violencia de estado y empresas de energía, por otro. Pero capas de regalos distópicas y pasados cargan de visiones utópicas de la Conferencia, que requieren enormes actos públicos del olvido y la confabulación orientada al futuro. ¿Qué ficciones y no olvidarse la fabricación de algo había llamado una economía nacional dependen? 6

La industria pesquera proyectada, por ejemplo, requeriría de un programa de controles ambientales por la contaminación fuera de la plataforma, y sin embargo según mis interlocutores de Guinea Ecuatorial trabajando en plataformas petroleras, a partir de 2009 no ha habido una sola independiente ambiental Informe sobre industria offshore de Guinea Ecuatorial. Para la educación de ingenieros y oceanógrafos, el país contaba con una Universidad funcione, que durante mi trabajo de campo tuvo electricidad esporádica, una biblioteca de libros tal vez cincuenta y seis equipos pertenecientes a un programa de estudio en el extranjero americano haciendo investigación en primates (conocidos localmente como los monos). Una historia un poco más profunda de la industria pesquera y papel prospectivo de Annobón en esto nos lleva de vuelta a 1975, cuando Macías proscrita médicos (como parte de lo que él percibe que la clase intelectual formados en el extranjero y una traición) y la mitad de la isla los habitantes murieron por falta de atención médica. Durante mi trabajo de campo, uno sólo podría llegar a Annobón en barco — un servicio de ferry estatal que era notorio no fiable y a menudo desviados a Bata. El nuevo aeropuerto estaba bajo construcción en Annobón, sin embargo, y aunque citadas pasajes sería prohibitivos para la mayoría de los desplazamientos a y desde Annobón para su sustento, el aeropuerto fue fundamental para la industria del turismo imaginado, lo que permite acceso a Annobón exquisitamente bella, escasamente pobladas playas. Futuro de Annobón como una utopía turística de playas vírgenes despobladas convenientemente por la lepra y otras formas de violencia política es overlaid con la historia de la isla, pero también con las formas contemporáneas de la vigilancia a lo largo de Guinea Ecuatorial. Durante mi trabajo de campo, mapas eran ilegales, como fotografía en ciudades o en cualquier lugar a la vista de un policía o soldado. Mientras que los folletos turístico y sitios web anuncian las hermosas vistas que se tenía en el Pico, la montaña que se levanta a lo largo del borde suroeste de Malabo, de soldados guardaron el camino a la montaña. En mis catorce meses en Guinea Ecuatorial, nunca pude garantizar permiso para subir.

El utópico futuro agrícolo tiembla incómodamente en el borde de la distopía así. Históricamente, trabajo en la industria del cacao de Guinea Ecuatorial fue proporcionada en gran parte por los inmigrantes, primero liberianos y los nigerianos (Serrano Campos y Micó Abago 2004). Dentro de cinco años de la independencia, Macías comenzó a dejar de pagar a los nigerianos, que salieron en masa. En su lugar, Macías decretó una ley de trabajo obligatorio para los ciudadanos de Guinea Ecuatorial en 1972, provocando éxodos masivos. Desde la estrepitosa caída de la producción de cacao que siguió, Guinea Ecuatorial no ha tenido ninguna agricultura industrializada. Mientras que gran parte de la población fuera de las grandes ciudades está implicado en la agricultura de subsistencia y la venta de pequeños excedentes, productos agrícolas a granel son, en general, procedentes de Camerún. Menos de un mes después de declaraciones de la Conferencia sobre el futuro de la agricultura, el entonces Ministro de agricultura y silvicultura (hijo del Presidente tan denostada Teodorín) fue mostrado en la televisión literalmente tirar dinero y herramientas básicas a los agricultores eufóricos, brazos extendidos.

Imaginar que la maldición de los recursos podría comenzar para tener en cuenta para los desafíos actuales, o claramente formas de fortalecimiento o diversificación de algo llamado la economía nacional a raíz de estas historias, sería risible — deconstruibles, de hecho, si lo hiciera no tienen tanto poder. Aquí la teoría económica abre una distancia entre historias locales literalmente indescriptible y algo llamado una economía nacional.

UTOPÍA y distopía II: Deseo Sector privado

Las utopías surrealistas presentadas en la Conferencia no fueron el producto de la teoría de la maldición de recursos solamente. Estas fantasías de sector privado independientes, idealizadas fueron también arraigadas en experiencias locales de un autoritarismo asfixiante y en imaginaciones translocal de las riquezas sin fin en la frontera de Guinea Ecuatorial. A pesar, o tal vez debido a las surrealisms espejadas de un sector de la pesca en medio de contaminación offshore sin trabas y una industria del turismo sin mapas ni cámaras, repetidamente he encontrado yo en la inesperada posición de animar para este objeto imaginario del deseo llamado un sector privado. No estaba solo. El como-si la distancia se abrió por la teoría económica, la supuesta seguridad de una esfera separable llamada la economía nacional, no tiene una sola Valencia política. No sólo trabajar en el servicio de energía. En esta conferencia y más allá, se permitieron también críticas al régimen de Guinea Ecuatorial y su complicidad con las compañías petroleras estadounidenses que estaban de otra manera insostenible e incluso ilegal.

Uno de los primeros miembros de la audiencia para hacer una pregunta después de la narración surrealista de utopías futuras era Alberto, que pasó a vivir en el apartamento de encima mío y fue el jefe de la delegación de Guinea Ecuatorial para las pequeñas empresas. Indirectamente hace referencia a las amnesias de la Conferencia, recordó a los asistentes de un foro nacional de 1982 sobre la promoción de negocios y de la Conferencia de 1997, donde el sector privado también se estableció como el motor del desarrollo. ¿Después de estos recordatorios, se preguntó “Dónde estamos ahora? Financiamiento y acceso al crédito, educación, condiciones laborales buenas, acceso a la tecnología y un clima fiscal según la ley. “No estoy xenófobo, continuó,”pero las empresas extranjeras se conceden todos los grandes contratos y entonces nos estamos contratados con salarios deprimentes como subcontratistas. Tengo la capacidad pero me falta el capital. Si tuviera el dinero, yo, también, podría subcontratar un arquitecto o un ingeniero.” Al terminar, la sala estalló en aplausos bullicioso y alegre voz, y se volvió y sonrió y saludó a la multitud. Su pregunta fue una velada crítica del estado y de conferencias iterativos que llegaron a las mismas conclusiones pero producción nada, sin crédito, sin educación, sin clima fiscal conforme a la ley, no retirada del estado de su control del sector privado . A pesar de estos fracasos seriales, la entusiasta respuesta a su pregunta reveló que la Conferencia y su imaginario sector privado ofrecen la oportunidad, que no pueda utilizarse, para las personas se reúnen en gran número a alentar ruidosamente a críticas indirectas de el régimen.

Para muchos en Guinea Ecuatorial, esto imaginaba sector privado era el Reino preferido de las fantasías de libertad y oportunidades. Mientras que estas fantasías eran ciertamente no uniformemente compartidas, ni eran el sueño exclusivo de los ricos o bien conectado. Estos deseos se extendía desde empobrecidos hip-hop jóvenes que tuvieron que ir a Gabón para encontrar un estudio de grabación sin gobierno o funcionario español patrocinio/censura a jóvenes estadounidenses trabajando en un programa de “MBA sin fronteras” que fueron sorprendidos en la medida en que, como ellos, “gran hermano está mirando todo en Guinea Ecuatorial.” Un sector privado independiente de esta sensación generalizada de vigilancia y control se sentía francamente radical. Aquí, quiero explorar distintos momentos de este deseo por y la idealización de un sector privado futuro, pensando a través de su carácter ambivalente de la subversión, por un lado y la subvención íntima del poder del estado, por el otro.

Los fines de semana en junio y julio de 2008, Orange, la marca central de Telecom de Francia, en ese momento tratando de incursionar en el mercado de celulares en Guinea Ecuatorial, patrocinó un festival de música y danza libre, estableciendo un sistema de sonido y escenario en la plaza pública alrededor de Ayuntamiento de Malabo. Lleno de molestos anuncios grabados sobre naranja bienes y servicios a todo volumen entre actos juveniles, el festival permitido algo que rara vez ocurrió en Guinea Ecuatorial: libre de arte público y una reunión pública al aire libre, aparentemente sin relación con el régimen. Asistí a la fiesta casi cada fin de semana, unirse a una pequeña multitud que fue en su mayoría grupos de adolescentes con sus hermanos menores a cuestas, aunque un poco de todo el mundo bordeó los bordes del evento, curiosidad por el inusual espectáculo público. Mientras que inundó de alabaciones (canciones de propaganda política) la industria de la música oficial, cuya única fuente de ingresos era el estado, la etapa de verano naranja jactaba no una canción alabando a Obiang o el régimen. De hecho, varias canciones criticaron él, directa o indirectamente. Había incluso una canción sobre la marihuana.

Con mano de obra y evento gestión subcontratada a una empresa de medios de comunicación de Guinea Ecuatorial pequeña propiedad de un joven ecuatoguineano regresó recientemente de la vida y la educación en el extranjero, el público fue seducido claramente por qué Orange y sus colaboradores locales fueron capaces de facilitar. En un lugar donde la disidencia se redujo a silenciosos conversaciones alrededor de las mesas, los espacios que la empresa privada parecía abrirse, como esta etapa naranja — se sentía extrañamente radical y fuera de control. Como Alberto, que se sintió libre criticar el estado en una conferencia sobre la economía, en el escenario naranja, también el sector privado en su propia imagen se convirtió en un espacio fieltro de posibilidad e imprevisible para la ejecución de jóvenes Guinea Ecuatorial, para aquellos de nosotros en la audiencia , así como para el alcalde a quien vi salir en un huff durante la canción de la marihuana. En lugar de todo lo que pasó en el escenario naranja ese verano despedir a — o, de hecho, fantasías del privado sector en general, como siempre ya comprometida por algún mal esencial del capitalismo, sigo Hirokazu Miyazaki (2013) y otros en sugiriendo que para seriamente en parte la economía significa tomar en serio fantasías de la gente acerca de él.

La seducción del sector privado era un tropo común con el que narrar lo que fue y no fue posible en Guinea Ecuatorial. Tomar Feliciano, otro hombre de Guinea Ecuatorial recientemente devuelto trabajaban para una compañía de software con un contrato para digitalizar el sistema de seguridad social. Observó con un orgullo que, en su opinión, este trabajo desafió étnica y otras divisiones locales, lo que implica que esas divisiones se agravaron por las prácticas de mantenimiento de registros manuscritas, inconsistentes que su empresa buscaba poner en el pasado. Me dijo que su proyecto traería un cambio real “si es que no Haz iniciado en primer lugar.” Sonrió y me dijo que, también, esperaba no llegar expulsados, a lo que él respondió, “Oh, pero no es una ONG. Somos un negocio, en hacer dinero”. La diferencia, explicó, fue en la política: las ONG representan intereses políticos y por lo tanto son más propensos a ser expulsados. Beneficio, por el contrario, es apolítico. Mientras que Feliciano sabía que era una investigadora afiliada con una universidad extranjera, a cualquier ONG, mi falta de cualquier lucro me colocó en el lado político de una línea. Fue único beneficio que ofrecen refugio seguro en un lugar donde conseguir echado era una posibilidad real histórica y contemporánea.

De la serie de conciertos de verano naranja a convicción de Feliciano que el lucro al abrigo de su presencia y potencial para fomentar el cambio social, la sensación de que el sector privado fue vario no comprometido y lleno de potencial era penetrante. Y sin embargo, es precisamente porque las ganancias privadas son casi en su totalidad de una pieza con el poder público en Guinea Ecuatorial que parece operar tan libremente. En otras palabras, mientras que la economía nacional sin lugar a dudas abrió contingentes y inestables espacios de expresión, disidencia u oportunidad para beneficio privado, era fundamentalmente un proyecto sancionado por el estado y la creación de un estado. Como un trabajador de desarrollo privado, “si viene con los socios de la derecha”, prácticamente puede hacer lo que quiera, señalando la necesidad de colaborar con un enlace local, o un socio, en los negocios. Decreto 137, que el mandato que todos los negocios sea al menos el 35 por ciento de propiedad local, hizo el papel de socio uno común para personal de estado de Guinea Ecuatorial o individuos de alta potencia, poner en retención para servir como enlace del gobierno. Empresas extranjeras pagan lícitamente un socio para proteger a sus intereses, mover sus ideas necesita por delante y pasar sus documentos. Así, mientras que Feliciano estaba emocionado que empujó a su empresa contra los localismos de varias clases, la empresa también utiliza esos localismos muy (denominados enchufes o “tapones” en el sistema) para asegurar el éxito. El sector privado idealizado que señas con utopías futuro sin límites de pesca y el turismo, y que atrajo a aquellos de nosotros que vivimos en tiempos de auge de Malabo hacia fuera en las noches de verano de conciertos patrocinados por la empresa, sin lugar a dudas se enreda en el nudo de Ecuatorial Aparato de estado de Guinea y Estados Unidos de petróleo empresas, un nudo hecho lícito por la serialidad de la forma de la economía nacional.

CONCLUSIÓN

En la jornada de clausura de la Conferencia de 2007, los participantes fueron visiblemente cansados. Personas straggled en la sala de conferencias tarde; hubo menos animados debates en los pasillos. Después de las noches discutiendo el evento sobre cenas con los amigos de Guinea Ecuatorial, nuestras conversaciones, también había crecido cansado, de risa temprana en las metas imposible hacia el letargo de largos días y tiempo perdido. Me senté y se sentó con otros miembros de la audiencia final mañana, esperando que el Presidente parece, lentamente se hunde hacia abajo en nuestras sillas, arrugar nuestra ropa y tratando de hush nuestros estómagos gruñan. Escribí en mi cuaderno: el futuro es agotador. Finalmente, la voz del locutor del Presidente nos despertó de nuestros depresiones y guardias de seguridad marroquí del Presidente irrumpió en delante de él. El público aplaudió en ritmo, y Obiang se unieron en mientras caminaba hacia su asiento en la mesa principal.

Entonces, por un momento, era como si el futuro imposible dio forma y la distopía del presente que se deslizó en. Ante el Presidente y otros sentados en la mesa frontal, presentadores de gobierno elaboran con una brusquedad que me sorprendió los problemas graves y evidentes, que el país tendría que superar para alcanzar sus metas. Otra vez, transcribimos en la traducción de varios presentadores: somos esencialmente sin todos los servicios sociales básicos. Hay poco que no hay agua, no potable. La electricidad es esporádico en las ciudades y no distribuidos en todo el territorio. El sector salud es esencialmente inexistente para la mayoría de los residentes del país, y el sector de la educación es mucho mejor. Hay no transparente acceso al crédito para las empresas y ningún proceso regularizado según la cual uno puede empezar un negocio. Hay una total falta de instrumentos legales o de regulación en todos sectores. Hay serios problemas con el derecho de propiedad y contrato privado. De hecho, no existe ninguna ley de contrato de estado.

En Guinea Ecuatorial, vemos que la economía con más inversiones en el mundo funciona sin ley del contrato; que maldicen el recurso — utilizado en serie diagnosticar las enfermedades de los Estados ricos en recursos naturales, a menudo encuentra poca tracción empírica; ese algo nuevo legible y publicitada como una economía nacional puede venir a ser, como si, a raíz de un boom de productos básicos; y que este objeto abre espacios políticos imprevisibles en que el poder puede consolidar y ser vulnerable nuevamente. Todo esto nos dice cuando asumimos para saber lo que es una economía nacional y lo que hace, lo hacemos por nuestra cuenta y riesgo. Etnografía puede ayudarnos a localizar los sitios, prácticas, personas, documentos, ensueños e instituciones que continuamente rehacen la economía nacional como una forma global serie.

La particularidad histórica de Guinea Ecuatorial en la vuelta del Milenio permite pop en una cierta clase de visibilidad de la economía nacional. Es la tentación, por lo tanto, pensar en Guinea Ecuatorial como excepcional, a pensar en las historias locales de información y estadísticas, por ejemplo, como incomparable. Y por supuesto, Guinea Ecuatorial es excepcional en algunos aspectos. Si estamos dispuestos a pensar un poco más ampliamente, es tentador pensar que de los datos y estadísticas en África o el mundo más amplio en desarrollo como excepcionalmente fina o poco fiables. Pero cuando estudios recientes en Francia y el Reino Unido afirman que “sólo un tercio de las cifras oficiales de confianza de los ciudadanos” (Stiglitz, Sen y Fitoussi 201010), vemos que tenemos una pregunta más amplia sobre nuestras manos. Los espacios cargados de afecto de como-si: distorsión, simplificación, olvidarse, longing, indignación, donde mundo y representación se tiran apartes hacer espacio para preguntar sobre historias locales y transnacionales de poder y propiedad, como lo hizo Alberto. El ifs como interrumpir la singularidad de la representación de una determinada economía, la farsa que nos todos tienen una relación común a él, un interés compartido en cómo tarifas (ver Rae y Drury 1993). Del mismo modo, mientras que el gobierno de Guinea Ecuatorial puede ser excepcionalmente coextensiva con el sector privado, vemos que a través de los países miembros de la organización para la cooperación y desarrollo económico total salida las cuentas casi la mitad de PIB ( Stiglitz, Sen y Fitoussi 2010), desestabilizar un acercamiento a las economías nacionales que metonímicamente privilegia los mercados, o el llamado sector privado. Cuando pensamos en las economías nacionales, estamos siempre ya pensando el estado, así como nuestros deseos, fantasías y críticas pueden llevarnos en otras partes, como lo hicieron en la etapa de verano naranja o con la compañía de software de Feliciano. Nuestros planteamientos teóricos deben reconocer no sólo deseos del sector privado, pero también sus insuficiencias empíricas y colusiones políticas.

En su representación rudimentarias, una economía a una escala determinada es una estadística agregada, ampliamente reconocido como angustiosamente aproximada e incompleta en el mejor. Pero por supuesto, al mismo tiempo, la economía es la más poderosa singularidad de nuestro mundo contemporáneo. Antropología tiene la tarea empírica espaciosa y creativa no de poner preguntas sobre historia, colonialismo, fantasía, epistemología, información, y el estado en (como si la economía era, de hecho, desarraigado de ellos), sino de mostrar que siempre ya constitutivo de esta cosa llamada la economía, especialmente en la escala de la nación, aunque no sólo allí. Una vez que desarrollamos las herramientas metodológicas para entender cómo se fabrican las economías nacionales y a qué efectos, abre nuevo terreno teórico. Por ejemplo, la idea de una economía nacional es claramente engañoso, y sin embargo es uno de los efectos estructurales que mantienen el poder del Estado-nación. Teniendo en cuenta las formas en que las economías nacionales estaban obliga a Estados soberanos recién en el momento postcolonial, una amplia variedad de proyectos históricos y el archivos queda por hacer. 7 ¿cómo pueden los proyectos descentrar el Western, historia keynesiana narrado anteriormente? ¿O, dada la posición privilegiada de las economías nacionales en el pensamiento del desarrollo, lo que un relato etnográfico de económico crecimiento— más a menudo se calcula a nivel nacional, como? Más trabajo en las economías nacionales podría ayudarnos a pensar a través de la intersección de los imperativos de crecimiento con los imperativos del Antropoceno.

La violencia particular de la forma de la economía nacional en el Sur global y matricularse de las teorías económicas como la maldición de los recursos en que la violencia, pide atención etnográfica. Época de la independencia senegalesa gobernantes Mamadou Dia y Leopold Senghor fueron profético en sus preocupaciones que, pesar de que lucharon por la independencia política de Francia, desigualdad relacional entre colonizadores y pronto a ser Estados-nación no llevaría ser deshecho por “independencia nominal” (Cooper 2015, 68; ver también Pierre 2012; 2015 de Ralph) en un mundo insistieron era cada vez más interdependiente. Las secuelas de sus inquietudes en vivo, tocando en esos momentos cuando mundo y representación no son uno, cuando los planes de desarrollo y teoría económica ocluyan poder corporativo transnacional, cuando el desempeño no es tan completo que el modelo se convierte en el mundo. Estos son los espacios de posibilidades políticas dentro de las ejecuciones de la política moderna. Encontrarlos es para participar en el proyecto etnográfico clásico de hacer extraño lo familiar: “dada la centralidad de la economía a las representaciones sociales modernistas… es necesario para defamiliarize la economía como las feministas desnaturalizó el cuerpo, como un paso para generar concepciones alternativas sociales y permitiendo nuevas subjetividades políticas a nacer”(Gibson-Graham 1996, 97).

NOTAS

1. la mayoría de la inversión se calcula sobre el total del gobierno y la inversión del sector privado, como porcentaje del PIB. En Guinea Ecuatorial, se trata de dinero del petróleo verter pulg. “de más rápido crecimiento” es calculado por el PIB, que fue de 24.7 por ciento en el sur de Sudán, el país del mundo más nuevo. Agradezco a James Ferguson para dibujar inicialmente mi atención a la lista de la IMF.

2. gracias a William Mazzarella de la formulación original de las economías nacionales como no sólo inteligibles, sino también convincente.

3. se trata de proyectos en los mercados (Callon 1998; Çalişkan y Callon 2009, Çalişkan 2010; Elyachar 2005; Riles de 2011; Tsing 2015); las instituciones financieras y agentes (Ho 2009; Miyazaki 2013); las corporaciones y empresas (Yanagisako 2002; Welker 2014; 2014 de kirsch; Golub 2014); dinero, regímenes monetarios y banca central (Maurer 2011, 2012; Peebles 2011; 2014 de Holmes); y la experiencia, performativo y de otra manera — de la economía y los economistas (Callon 2007; Fourcade 2010; MacKenzie 2008).

4. en la imprevisibilidad de desempeño económico, ver también mayordomo 2010 oso et al 2015y Narotzky y Besnier 2014.

5. Fernandino (nombrada Fernando Po, el nombre colonial de la isla de Bioko) generalmente se refiere a dos grupos de la época colonial en Guinea Ecuatorial. Incluye a los hijos de padres españoles y madres Bubi que, en virtud de su paternidad de la Mezclar-raza, consideraban emancipados (emancipado) debajo de las jerarquías coloniales y por lo tanto tienen derecho a poseer tierras y ejercer otros privilegios no concede otros ecuatoguineanos. El término también se refiere a los descendientes de esclavos liberado de habla inglesa que volvieron de los Estados Unidos a Sierra Leona y Liberia y más tarde se vieron obligados a emigrar a Guinea Ecuatorial como trabajadores. Llegar con educación formal sustancial en comparación con la población local y también considera emancipados, este grupo de personas mezclaron y trabajó de cerca con los británicos, que tenían una presencia colonial en Fernando Po hace aproximadamente cincuenta años a partir de 1826. Finalmente, los Fernandinos se convirtieron en grandes terratenientes, y muchos de sus reclamos de tierras persisten en la actualidad.

6. para obtener respuestas a esta pregunta en otras geografías, véase Harris 1993, James 1938, Moreton-Robinson 2015y Williams 1944.

7. ver Alden Young (2014, 2017) trabajan en Sudán, donde indicadores de crecimiento del PIB fueron publicados semanalmente en la portada del periódico nacional a raíz de la independencia de Gran Bretaña y Egipto.

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Resumen

¿Qué es una economía nacional? ¿Lo que hace medir, valor o representan? ¿Qué hace? Este artículo discute para atención etnográfica a las economías nacionales como una serie mundial, podría decirse que más privilegio objeto epistemológico y político de nuestra modernidad desigualmente compartida. En diálogo con enfoques feministas al estudio del capitalismo, Antropología económica y los estudios sociales de las finanzas, este artículo pide a las economías nacionales a ser inteligible, que poseen unidad representacional o autoridad naturalizada, y convincente, las cosas de fantasía y deseo, poder y sometimiento. Tomando una serie de conferencias económicas nacionales en Guinea Ecuatorial como un punto de partida, el artículo aboga por la centralidad del estado y las cuestiones de escala geopolítica en cualquier acercamiento a la forma de la economía nacional. Yuxtaponiendo la literatura sobre performatividad económica con la historia política de Guinea Ecuatorial y el poder de las compañías petroleras de Estados Unidos en las iluminaciones del sur globales abierto de lo que Michel Callon ha llamado economía “en la naturaleza” y como-si cualidades generados en el cruce de teoría económica y la desigualdad postcolonial. Así, este artículo pretende abrir posibilidades etnográficos frente a las economías nacionales más allá de las fronteras de Guinea Ecuatorial.

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Extraído de: https://culanth.org/articles/914-toward-an-ethnography-of-the-national-economy

 


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Anthropology and Practice (Marco)

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